Una explosión de biodiversidad acompaña la travesía El Caribe Respira

Eso nos muestra que como seres humanos estamos haciendo un daño que solamente puede conllevar a nuestra propia extinción.

A bordo del Tortuga I, nos han acompañado a lo largo de la travesía animales de todo tipo: peces pequeños, delfines, aves marinas, migratorias y, cuando tocamos tierra, recibimos el siempre incondicional cariño de animales domésticos, al tiempo que avistamos distintas especies en el fondo marino y manglares.

Wilfredo Henao es biólogo marino y viaja a bordo del Tortuga I. Con él, se han documentado los encuentros con estas especies, y también se ha constatado el peligro que corren muchas de ellas.

"Hemos visto muchos animales durante la travesía, hemos tenido golondrinas buscando refugio en el velero luego de un mal tiempo, delfines acompañando durante grandes distancias la navegación y hemos pasado por santuarios de flora y fauna que vale la pena mirar con más atención", dice.

Para Willy, como es conocido, es evidente que estos encuentros han bajado en intensidad y número gracias a muchos factores, pero principalmente debido a la intervención humana a través de la pesca, la deforestación y el cambio climático que amenaza seriamente la fauna marina.

"Siendo buzo desde hace muchísimos años, me he dado cuenta que hay menos animales que antes, las máquinas de buceo nos han marcado temperaturas bastante elevadas en zonas de corales, lo que naturalmente los pone en amenaza, a ellos y toda la cadena alimenticia que sobrevive en el mar", explica.

Los delfines también se han robado la atención. Estos hermosos mamíferos marinos nos han acompañado durante todo el recorrido. "Hemos visto delfines moteados, delfines comunes y en algunos sitios vimos a los más pequeños denominados otavia, más ligados a la costa. Afortunadamente todavía se ven, son animales protegidos pero que están amenazados por la pesca masiva, como el negocio atunero, que despliega grandes redes en las que a veces quedan atrapados", agrega Willy.

Incluso un piquero patirrojo, un ave exuberante propia del Caribe acompañó un par de horas en la proa del velero a la tripulación. A bordo, hemos apreciado los espectáculos ofrecidos por los peces voladores, los grandes albatros, y el espectáculo del fondo marino que vemos en las zonas bajas en donde proliferan corales. El Caribe Respira es una travesía henchida de biodiversidad.

El Caribe Respira, de La W y Coca Cola, con el apoyo de la Armada Nacional, La Fuerza Naval del Caribe y Acoplásticos, completa ya 40 días recorriendo el Caribe colombiano, entre la alta Guajira y el golfo de Urabá, y ahora se dirige hacia el archipiélago de San Andrés y Providencia. Su misión: recoger plásticos que contaminan el mar y hacer un llamado a todos los colombianos para que le den una adecuada disposición a sus residuos. Ya van más de 5 toneladas de basura recogida del mar y las playas por las que ha pasado el velero Tortuga I desde donde se documenta la expedición y el estado de nuestros mares y costas.