Muszif: un museo para el rescate del coral en Isla Fuerte
Una manera de dar a conocer la cultura zenú y de proteger los corales nació de dos buzos que también trabajan con niños de la zona.
Isla Fuerte es otro de los hermosos rincones que tiene el caribe para disfrutar de la biodiversidad, esta isla, ubicada a tan solo 11 kilómetros de las costas de Córdoba, pero que pertenece administrativamente a Cartagena, posee varios arrecifes coralinos que la circundan, tal vez los últimos de esta parte del norte, pues hay que bajar por el mar más de millas náuticas para encontrar corales siquiera parecidos.
Tal como todos estos arrecifes, los de Isla Fuerte se encuentran bajo amenaza constante por el cambio climático, las basuras y la acción del turismo.
Esfuerzos por salvarlos no faltan en esta isla de 3,2 kilómetros cuadrados. Uno de ellos es Muszif: Museo Submarino Zenú de Isla Fuerte. Esta iniciativa, nació de un buzo local, Arnold Llorente y de Tatiana Orrego, una paisa que se asentó en este bello rincón del Caribe. "Los arrecifes están dentro de los ecosistemas más amenazados del planeta. Los problemas deben abarcarse desde el origen, y el problema es que los seres humanos desconocemos lo que hay debajo en el mar, hemos estudiado más la Luna que el fondo del mar, creemos que es un recurso infinito, pero en algún momento se va acabar", asegura Tatiana.
Esa preocupación, se combinó con un tema cultural sobre los ancestros de Isla Fuerte: la cultura Zenú, que llegó a través de las costas de Córdoba en frente del lugar. Muszif se dedicó a rescatar la esencia de esos primeros habitantes. "Eso se estaba perdiendo y pensamos que era importante rescatarla. Investigamos, nos encontramos con toda esta mitología zenú que aún está viva en muchas partes de Córdoba y recreamos esculturas para sumergirlas en el fondo del mar", cuenta.
El material con el que están hechas estas esculturas favoreció que se llenaran de vida muy rápidamente, pues tienen un ph igual al del mar. Llegaron algas, esponjas, hidrozoos, dándole forma definitiva a Muszif que hoy cuenta con 6 piezas sumergidas a unos 6 metros de profundidad.
“Lo ubicamos muy cerca de un arrecife natural, cuando el coral desova, la plánula viaja en búsqueda de un sustrato duro y libre, y allí desarrollarse como coral, eso es lo que está ocurriendo con estas esculturas, sirviendo como sustrato para nuevos corales", explica Orrego.
Lo que siguió después de presenciar la maravilla de la naturaleza, fue empezar a configurar todo para que, con el tiempo, el museo adquiriera dolientes. Y quién mejor que los niños para ese propósito. Junto a Muszif se desarrolla la escuela de buceo Guardianes del Mar. Son cerca de 25 niños los que se han iniciado en el arte de bucear, justo en la zona del Muszif.
foto (Cortesía Muszif)
Junto a las lecciones, se les instruye sobre el peligro en el que se encuentran los corales, la importancia de conservarlos y a sembrar corales muertos, con la esperanza que las nuevas plánulas se adhieran a ellos.
"Junto a estos niños hacemos jornadas pedagógicas con los turistas, sobre todo con el tema de las basuras y el no pararse sobre los corales. La gente cree que no, pero cuando pisa un coral lo está matando, y eso estaba ocurriendo en Isla Fuerte, afortunadamente por la época de pandemia el turismo bajó y se recuperaron, pero ahora Guardianes del Mar y Muszif les hacemos ver la importancia de cuidar este ecosistema", puntualiza Tatiana.
Muszif está ubicado cerca de la costa del hotel EcoHouse en Isla Fuerte, y cualquier persona con mínimos conocimientos en el buceo y el careteo puede acercarse a la zona y ver de primera mano las figuras que están sumergidas, esculpidas por el maestro cordobés Pedro Puentes. Estas esculturas, tienen motivos acordes a la cultura Zenú: la maternidad, dos caciques y un cadufo en forma de una deidad.