Iglesia en Quibdó pide al Gobierno mayor compromiso frente a la pandemia
Tras el aumento de contagios en Quibdó, la Diócesis de la ciudad anunció que los templos cerrarán sus puertas hasta el próximo 4 de julio.
Iglesia en Quibdó pide al Gobierno mayor compromiso frente a la pandemia / imagen de referencia. Foto: Getty Images(Thot)
A través de un comunicado, la Diócesis de Quibdó expresó su preocupación por la agudización de la situación sanitaria en esta zona del país y el aumento de los contagios por COVID-19.
Indican que los casos son cada vez más frecuentes y las actividades de prevención y atención son escasas por parte del Gobierno Nacional.
La Diócesis de Quibdó en este caso pide a las personas e instituciones a comprometerse más y decididamente con la protección de todas las vidas de la región.
“Pedimos a las autoridades sanitarias y de gobierno, adelantar de manera más integral, programas pedagógicos, de observación y respeto por las normas sanitarias; cumplir y hacer cumplir estrictamente los protocolos para la inhumación de personas que fallecen por el COVID-19; y fortalecer la estructura asistencial para responder al momento actual y salvar más vidas”, indica el comunicado.
Piden además a la comunidad evitar actividades masivas y en sitios de diversión, o fiestas familiares que constituyen una de las principales causas de contagios.
Así mismo la iglesia anunció que desde el lunes 21 de junio hasta el domingo 4 de julio, los templos parroquiales estarán cerrados.
Además, los sacerdotes se abstendrán de realizar reuniones y de visitar comunidades rurales durante este tiempo.
De acuerdo con lo indicado en otros momentos, las exequias no se podrán celebrar en las casas ni en las calles. Durante estas dos semanas, las exequias se celebrarán con la participación de solo diez familiares de la persona fallecida.
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Aclaran que en la ciudad de Quibdó, la celebración de exequias se realizará solamente en la Catedral San Francisco de Asís. Por lo que advierten que en caso de que las familias no acaten estos criterios, los sacerdotes se verán en la obligación de negarse a la celebración de la ceremonia.
