Cabo Tiburón: el extremo de Colombia amenazado por la basura y la pesca
SOS por el último rincón de Colombia, en el golfo de Urabá para el que urge atención y acción.
Cabo Tiburón: el extremo de Colombia amenazado por la basura y la pesca
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Las aguas de Cabo Tiburón contienen una gran diversidad, empezando por los arrecifes coralinos costeros que lo bordean y que alcanzan su esplendor en la bahía de Sapzurro. . Foto: Sergio Vásquez/El Caribe Respira
El último punto del Caribe colombiano antes de la frontera con Panamá está al norte del Chocó. denominado Cabo Tiburón, esta porción de tierra y mar pertenece al municipio de Acandí, con corregimientos exuberantes como Capurganá y Sapzurro, que con sus playas y corales atraen a miles de turistas a lo largo de todo el año.
La belleza de esta zona la corona el inicio de la serranía del Darién, el accidente geográfico que no ha permitido la conexión terrestre por carretera entre Colombia y Panamá.
Las aguas de Cabo Tiburón contienen una gran diversidad, empezando por los arrecifes coralinos costeros que lo bordean y que alcanzan su esplendor en la bahía de Sapzurro.
Allí, la travesía El Caribe Respira, de La W y Coca Cola, con el apoyo de la Armada Nacional, la Fuerza Naval del Caribe y Acoplásticos, constató a bordo del Tortuga I el grave problema de la basura en estas costas.
El primer problema es la cercanía con el golfo de Urabá, ubicado un poco más al este, de allí, viajan a través de las corrientes marinas todo tipo de desechos que son arrojados al mar por el río Atrato.
Al llegar a Sapzurro, nos recibió una larga estela de residuos, atrapados entre troncos y madera aserrada propia de los bosques del bajo Atrato. En la superficie, encontramos botellas, restos de chanclas, vidrio e icopor, residuos consistentes con lo visto a lo largo de todo el Caribe continental, y que además refleja el grave problema de cultura y disposición de residuos en las poblaciones aledañas a los ríos en todo el territorio nacional.
Esa basura se disemina en altamar y otra parte es arrastrada por las olas hasta las costas de Acandí, Capurganá, Sapzurro y La Miel, esta última en Panamá, al otro lado del cerro que adorna a Cabo tiburón.
La pesca es importante en esta zona, por lo que las malas prácticas en este arte también están amenazando el equilibrio ambiental de la frontera colombo panameña.
De acuerdo con un informe entregado por la estación de Guardacostas de la Armada Nacional, son frecuentes los hallazgos de redes de pesca abandonadas, un peligro inmenso para muchas especies.
El capitán Óscar Ortiz, comandante de la estación de Guardacostas del Urabá, afirma que desde su competencia se ejercen controles para proteger el santuario de fauna de Acandí, que cuenta con algunas restricciones, pero los incidentes no faltan. "La principal falta son los trasmallos, desafortunadamente la costumbre es extenderlo, dejarlo un tiempo y regresar a ver qué se cogió después de varias horas. En ocasiones, sea por falta de conciencia o por las condiciones del mar, terminan abandonando estos trasmallos que son los que terminan en el fondo generando la afectación a las especies", explica.
Una de las víctimas más frecuentes de esta práctica es la tortuga Carey, que también tiene su desove en Playón y La Playona, sectores aledaños a Acandí. Los corales también sufren con estos trasmallos, que en su mayoría pueden superar los 10 metros de longitud. En la limpieza submarina más reciente adelantada por Guardacostas, se logró recoger uno a 25 metros de profundidad, ocasionando un daño irreversible, pues se trajo consigo corales y decenas de peces de 6 especies muertos.
Así se debate cabo Tiburón, entre la exuberancia y el peligro ambiental que representa la raza humana.
Sin ningún sonrojo, hemos inundado los mares de basura y hemos cazado sin piedad y respeto por el océano a una fauna que, finalmente en esa cadena impoluta que es la naturaleza, ayuda a brindarnos más del 70% del oxígeno que respiramos.