Uribe le dijo al Gobierno que el próximo vicepresidente debería ser conservador
Esta no es una decisión menor, teniendo en cuenta que el Gobierno necesita el apoyo de los conservadores para aprobar la Reforma Tributaria en el Congreso.
El algoritmo de este lunes nos lleva a hablar nuevamente sobre el posible reemplazo de Marta Lucía Ramírez porque el 28 de febrero el presidente Iván Duque le dijo a Noticias RCN que si Ramírez renuncia, su sucesora será una mujer, lo que implica la salida de la baraja del candidato del Partido Conservador y del expresidente Andrés Pastrana, Camilo Gómez Alzate.
Este hecho tiene muy nerviosas a las directivas conservadoras que temen que el presidente Duque no nombre a uno de los suyos en el cargo, tal y como lo ha pedido el presidente del Partido, Omar Yepes, con base en el acuerdo político que llevó a Iván Duque a la Presidencia en 2018.
Nos cuentan que a esa discusión entró el expresidente Álvaro Uribe, quien ha dicho en privado al ministro del Interior, Daniel Palacios, que si Marta Lucía Ramírez renuncia, la Vicepresidencia debería ser ocupada por una persona que haga parte del Partido Conservador.
Esta no es una decisión menor, teniendo en cuenta que el Gobierno necesita el apoyo de los conservadores para aprobar la Reforma Tributaria en el Congreso. Además, un deterioro en la relación entre el Partido Conservador y el Gobierno podría tener un impacto negativo en la coalición de la derecha, que se cocina para las elecciones de 2022.
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En los corrillos del Partido Conservador se sigue hablando de la Directora de la Agencia para la Cooperación, Ángela Ospina de Nicholls, para el cargo ya que, además de tener el sello azul, es consuegra del expresidente Pastrana.
Mientras tanto en la Casa de Nariño se habla de los nombres de la Secretaria General de la Presidencia, María Paula Correa, la Ministra de Transporte, Ángela María Orozco, y las ministras de Educación, María Victoria Angulo, y de las TIC, Karen Abudinen, a quienes el Partido Conservador no consideran como propias.
En resumen: cualquier decisión que se tome frente a la Vicepresidencia podría no sólo terminar de romper la relación Duque - Pastrana, sino enrarecer el ambiente entre dos aliados: el Gobierno y el Partido Conservador.