“Presidente ¡Basta ya del olvido estatal! merecemos vivir mejor”: alcalde de Puebloviejo
El mandatario de la población hizo un enérgico llamado a la clase política nacional para que la tragedia de Tasajera no quede en un simple recuento noticioso.
“Presidente ¡Basta ya del olvido estatal! merecemos vivir mejor”: alcalde de Puebloviejo(Thot)
Fabián Obispo Borja, alcalde de Puebloviejo, le pidió a Colombia que, luego que el accidente de Tasajera deje de estar en las agendas de noticias del país, no se vayan a olvidar de las otras tragedias constante que enfrentan a diario 33.030 habitantes, que con una informalidad del 94% sueñan con salir del onceavo lugar del listado de los pueblos más pobres de la nación.
Un municipio con 494 años de historia, según su Alcalde, ha tenido que enfrentar el olvido del Estado. Estos pescadores no quieren ser recordados solo por eventos y calamidades como la ocurrida el 6 de julio, quieren tener una mejor vida, exorcizar el fantasma de la miseria y la pobreza que los ha atemorizado por décadas.
Obispo considera que los 21 muertos, que hasta ahora se contabilizan del siniestro en el kilómetro 48 de la vía Ciénaga-Barranquilla, son la prueba que el municipio enfrenta un fenómeno social que va más allá de una pimpina de gasolina.
“Señor presidente, Iván Duque, en Colombia existe un municipio ubicado al noroccidente del país llamado Puebloviejo, donde vive gente amable. Desafortunadamente hemos sufrido por el olvido estatal. Por eso, en medio de esta crisis le pedimos que nos ayude a salir adelante. Nos merecemos una mejor vida”, indicó el mandatario local.
La imprudencia de los que desafiaron el peligro patentiza una causa segunda de gran preocupación del gobernante, sus coterráneos adolecen de oportunidades laborales y académicas, las cuales reclamó al gobierno central.
“¡Basta ya! Es tiempo de merecernos una mejor educación, agua potable de calidad y empleos dignos con el que llevar un sustento a nuestros hogares”, concluyó Fabián Obispo.
El enérgico pronunciamiento se dio en el marco de las protestas pacíficas que se registraron en el sitio de la tragedia. James Carbonó Mendoza, se convirtió en símbolo de la manifestación, un joven pescador que en la mañana del lunes mientras preparaba sus redes, y ante la poca venta del producido, emprendió su camino hacia un callejón sin salida que le esperaba, la muerte.
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En el municipio declararon 15 días de duelo. En Santa Marta avanzan las identificaciones de los cadáveres de los 7 calcinados y a las afueras de los centros médicos solo se escuchan las plegarias de quienes pelean con el destino y se aferran a que sus seres queridos no corran con la misma suerte de sus otros paisanos.
