Descartan tortura en caso de Flower Trompeta en Corinto, Cauca
Organismos judiciales reportaron que el cuerpo del ciudadano no presenta señales de tortura y desvirtuaron que una de sus extremidades fuese triturada en una máquina.
Las autoridades descartaron tortura en el caso de Flower Jair Trompeta Paví, quien murió en medio de confusos hechos con el Ejército Nacional en la vereda La Laguna, sector Media Naranja, zona rural del municipio de Corinto, norte del Cauca.
La Fiscalía asumió la investigación y determinó en la inspección técnica al cadáver que el ciudadano murió por impactos de arma de fuego.
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Los organismos judiciales también establecieron que sus extremidades se encontraban completas, y desvirtuaron las informaciones de la comunidad que señalaban que una de sus manos había sido triturada en una máquina despulpadora.
El fiscal general de la Nación, Fabio Espitia, dijo que el Cuerpo Técnico de Investigación, CTI, realiza las indagaciones correspondientes para aclarar estos hechos, y evitar que las muertes se usen “desde puntos de vista políticos o ideológicos”.
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De esa manera, expresó que buscan determinar si la muerte se produjo en combate o en medio de otras circunstancias, “inmediatamente se entregue el dictamen técnico, la Fiscalía dispondrá lo necesario en relación con las personas que pudieron haber tenido conocimiento o participación de los hechos”, sostuvo.
Medicina Legal
La directora general del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, Claudia García, detalló que el ciudadano murió como consecuencia de cuatro impactos de arma de fuego, dos en la espalda, uno en el cuello y otro en el brazo izquierdo.
“Los pasos del proyectil produjeron lesiones a nivel de órganos como aorta, pulmones, la reja costal y fractura del brazo izquierdo (…) Los impactos tienen una trayectoria posteroanterior (…)”, agregó.
Asimismo, ratificó que los hallazgos de la necropsia permiten descartar que hubo tortura.
El Instituto conformó un equipo interdisciplinario integrado por médicos, especialistas forenses, odontólogos, genetistas y balísticos que trabajaron bajo el protocolo de Minnesota, universal para el estudio de casos donde existan posibles violaciones de Derechos Humanos.
La Funcionaria explicó que las investigaciones continúan para determinar otros aspectos como la distancia de disparo.