Familia colombiana que huyó de la violencia hacia EE.UU. sería extraditada
Pablo Dunoyer manifestó que él y su familia tienen orden de captura en los EE.UU por lo que migración puede deportarlos en cualquier momento.
La historia de la familia Dunoyer, quienes emigraron desde Colombia hacia los Estados Unidos en el 2002, huyendo de la guerrilla, hace parte del nuevo documental de Selena Gómez para Netflix llamado “Living Undocumented”.
El propósito de la serie es ponerles rostro a los inmigrantes en Estados Unidos, haciendo énfasis en el rol que han jugado las administraciones pasadas y la actual sobre la situación migratoria en el país. Así, los seis capítulos relatan la historia de ocho familias indocumentadas, algunas en atención a sus trámites con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés de Immigration and Customs Enforcement) y a otras lidiando con las dificultades diarias de ser un indocumentado.
En diálogo con La W, Pablo Dunoyer cuenta la historia de su familia, quien llegó a Estados Unidos con una visa. A pesar de que solicitó asilo político, en el 2008 les negaron el requerimiento alegando que no se trataba de un caso 100% político.
Posteriormente, la familia buscó ayuda del representante local Duncan Hunter, quien introdujo una legislación privada en nombre de la familia para permitirles quedarse en los Estados Unidos. Aunque estos proyectos de ley nunca se aprobarían, mientras existieran y se reintrodujeran, los Dunoyer podían continuar viviendo y trabajando legalmente en Estados Unidos.
Sin embargo, Pablo Dunoyer relata que en la administración de Donald Trump, todo cambió: “(…) existe tolerancia cero con todos los casos de migrantes ilegales, no hay discrecionalidad. Antes solo perseguían a los criminales, ahora a todos los indocumentados”.
Además, en agosto de este año, Roberto Dunoyer, el papa de Pablo, salió a trabajar y jamás regresó. Fue deportado a Colombia, mientras que Consuelo, Camilo y Pablo, su madre y su hermano, respectivamente, siguen en Estados Unidos.
“Tenemos orden de captura en los Estados Unidos. La Policía de Migración puede entrar a nuestra casa para detenernos y deportarnos. Cuando nos negaron el asilo, ya no teníamos razón legal para estar en Estados Unidos. La diferencia entre nosotros y otros indocumentados es que ICE tenía nuestra información; fueron al trabajo de mi papá y lo detuvieron”, contó Dunoyer.
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