Batalla del Pantano de Vargas, la madre de todas las batallas que dejó más de 850 muertos
Una guerrilla de negros, lanceros llaneros y legiones extranjeras napoleónicas y británicas estuvieron en la confrontación.
Bastante agotado, después de cruzar el páramo de Pisba donde llaneros y legión extranjera que respaldó al Ejército Patriota dejaron sus vidas, Simón Bolívar llegó al Pantano de Vargas en el cual libraría una de las batallas más cruentas de la gesta libertadora, allí sintió debilidad, como lo narra el general Nicasio Martínez, comandante del Ejército.
“Donde salió la frase que dio al coronel Juan José Rondón: “salve usted la patria" porque no habían actuado sus hombres y soldados de caballería”, cuenta el general Martínez.
Javier Guerrero, historiador y director de Ruta del Bicentenario de la UPTC, narra que los hechos se dieron en medio de inundaciones, bajo una fuerte tormenta y una altísima complejidad militar que por momentos les hacía sentirse derrotados, entonces entraron los negros de quienes poco se habla del papel en la gesta.
El negro Félix Pabón, es un esclavo que se fugó de una hacienda; fue él quien hizo la campaña envolvente en el campo de batalla, cuando todo se tenía perdido y se comenzó la fuga”, narra.
Sumado a la intervención de las guerrillas negras, el comandante de los realistas, José María Barreiro, cometía dos grandes errores: los caballos se dispersaron y la lluvia arruinaba sus rifles porque la pólvora mojada no dispara.
Es en ese momento, los llaneros fueron el eje fundamental del triunfo por las condiciones climáticas, y por la estrategia que se planteó en el camino.
“La lanza con tres metros de acción desde el caballo fueron fundamentales lo que construyó la victoria”, narra el historiador Javier Guerrero
La legión extranjera fue clave, Bolívar reorganizó totalmente el Ejército con la estrategia de los grandes mercenarios de las grandes guerras napoleónicas y británicas fueron ellos los que trazaron la estrategia para cruzar por el páramo de Pisba.
“Aquí llegaron entre 600 y 700 hombres muy buenos cada uno en lo suyo. Traen sus armas europeas, tienen la estrategia que no teníamos y tiene sobre todo honor y el amor a la libertad. Se les pagaba con ron y wiskey”, cuenta.
La madre de las batallas no solo le pertenece a Paipa, cuenta el presidente de la Academia de Historia de Boyacá, Javier Ocampo. “Toda la zona alrededor de Duitama, Bonza en donde se encontraba desde luego el Ejército libertador y sobre todo Tibasosa parte del territorio del Pantano”
A las 10 de la mañana comenzó el enfrentamiento y finalizó a las 6 de la tarde del mismo día, los resultados fueron terribles. “850 muertos, 500 realistas y 350 patriotas incluida la legión británica”, narra este Ocampo, que ha escrito un sin número de libros de la independencia.
Este jueves 25 de julio se espera la llegada, al Pantano de Vargas, de la vicepresidenta Martha Lucía Ramírez, funcionarios del alto gobierno y el gobernador de Boyacá, Carlos Amaya para conmemorar los 200 años de la batalla.