En Tunja también determinan acciones contra venta de alimentos para palomas

Con respecto a la determinación de la Alcaldía de Tunja, de tomar acciones para el control de palomas en la Plaza de Bolívar de la capital boyacense, el secretario de Protección Social, Óscar Jiménez, explicó la forma de cómo se están caracterizando estos animales en el centro histórico, y las enfermedades que causan en especial a niños y adultos mayores.

“Las palomas son factores de riesgo de muchas enfermedades microbianas, bacterianas, nicóticas y virales sobre todo para personas vulnerables como niños y adultos mayores ya que en sus heces fecales se pulverizan muchos de estos microrganismos”, cuenta Jiménez.       

Ante esta decisión hay quienes consideran que primero se debe realizar otro tipo de políticas para evitar que las palomas se sigan reproduciendo y no ponerlas a aguantar hambre.

“Que no las pongan a aguantar hambre como usted puede verlas se miran los animalitos enfermos. Deberían utilizar químico o medicamentos para evitar que se reproduzcan en masa”, aconseja Andrés vendedor ambulante.

Doña Luz Marina Acosta, se dedica se dedica a lustrar zapatos cerca a la calle de la pulmonía, y cuenta que una de sus compañeras vendía alimentos para las palomas, pero hace días no la volvió a ver.

“Esa chica tiene cinco hijos, es muy pobre, yo le preguntó a usted de que va a vivir esa muchacha si la única forma de sobrevivir es con la venta del maíz y el arroz”, dijo Acosta.

Sin embargo, hay quienes consideran que la medida es acertada teniendo en cuenta el daño que genera el estiércol en el mármol o piso de la Plaza de Bolívar.

“Claro que se están multiplicando las infecciones de estos zuros y estoy de acuerdo que no se les de alimentos porque se reproducen más”, dice Javier Valencia.

En consecuencia la Secretaría de Gobierno de Tunja viene adelantando acciones de mitigación de venta de alimentos para las palomas amparándose en el código nacional de policía.