Los luchadores turcos que buscan la gloria embadurnados en aceite
Hace 658 años que se celebra el Festival de Lucha en Aceite de Kirkpinar, pero la tradición se mantiene intacta como siempre.
La provincia de Edirne, al noroccidente de Turquía, se ha convertido una vez más en el campo de batalla del evento de un deporte tradicional en el que los competidores luchan para conseguir un cinturón dorado y honrar una tradición de siglos de antigüedad.
El Festival de Lucha en Aceite de Kirkpinar, que se celebra este viernes, es uno de los eventos deportivos más antiguos del mundo y se lleva a cabo cada año desde 1362, con luchadores que batallan tanto física como mentalmente sin el uso de ningún tipo de equipamiento.
En la típica lucha en aceite, los competidores usan pantalones de cuero, se untan aceite de oliva en todo el cuerpo y buscan derribar a su rival en el campo para ser la última persona de pie. El que lo logre, conseguirá el título de Baspehlivan (luchador principal) y podrá usar el prestigioso cinturón dorado durante un año.
Foto: Agencia Anadolu
Para el pueblo turco, la lucha en aceite se ha convertido en una parte indispensable de la cultura del país, y se refieren a ella por lo general como un “deporte ancestral”.
A través de la historia, los turcos, particularmente los soldados, han practicado lucha con propósitos de entrenamiento, como muestra de coraje e incluso, como un medio para ganar el corazón de sus amores.
“La lucha en aceite une a las personas en nuestro país, y me siento orgulloso de hacer parte de este antiguo torneo que se ha realizado desde hace siglos. Esto refleja nuestra cultura”, declaró Ali Gokcen, un luchador experimentado, en declaraciones a la Agencia Anadolu.
Con 40 años, des los cuales ha dedicado 25 a la lucha en aceite, Gokcen dice que las tradiciones locales son las dinámicas principales que crean una identidad nacional y que, en este contexto, el festival de Kirkpinar juega un papel fundamental en la definición de la cultura turca.
“Luchadores de varias provincias vienen a la ciudad de Edirne para conmemorar este festival y nuestra cultura. Empezamos con oraciones, cantamos el himno nacional, recordamos a los luchadores famosos y mostramos respeto a nuestra herencia cultural con las generaciones jóvenes de luchadores que pasean por el lugar”, relata Gokcen.
El luchador expresó que lo llena de orgullo batallar en los campos “sagrados” de Sarayici, en donde tiene lugar este evento, independientemente si gana o no el campeonato, ya que tiene la oportunidad de participar en un deporte jugado en Oriente Medio que jugó el mismo profeta Mahoma.
“Sudar en los campos en donde aparecieron los luchadores legendarios durante siglos es una experiencia que no puedo describir en palabras”, dijo Gokcen, y aseguró que seguirá participando en el festival de Kirkpinar toda su vida.
Los rituales únicos y personajes de Kirkpinar
Al igual que en otros eventos antiguos, el festival de lucha en aceite de Kirkpinar también ha desarrollado rituales característicos en lo corrido de estos siglos.
Hace varios siglos, cuando no había tantas herramientas, los pioneros del Kirkpinar solían enviar velas con bases rojas a otras aldeas para informar a las personas que el torneo estaba próximo a suceder. Hoy, con el objetivo de preservar la tradición, las autoridades siguen enviando este tipo de velas a los luchadores.
Luego, viene el pesrev, la danza típica en la que los luchadores calientan, animan a la multitud y saludan a sus oponentes. Los competidores realizan esta tradición con el fin de saludar a la multitud, provocar a sus oponentes y obtener poder espiritual.
El animador, o “cazgir” es responsable de presentar los luchadores al público. Y después, con un poema leído de forma tradicional, invita a los competidores al campo para dar inicio a las oraciones.
Los músicos de percusión y de zurna (flautas) también juegan un papel muy importante en este antiguo festival. No solo porque tocan en las calles e invitan a las personas a acudir a las personas a los partidos, sino que también participan en los encuentros, especialmente cuando la energía está por debajo y le informan a los luchadores que la multitud quiere ver acción de verdad.
El Kirkpinar Aga, o patrón del festival, es responsable de dar inicio al evento.
Aunque el rol del patrón ha cambiado con el paso de los años y se ha convertido en una figura más simbólica, en la antigüedad, estos patrones brindaban asistencia financiera a los luchadores y realizaban eventos de caridad en sus pueblos para honrar el festival.
¿Por qué se usa aceite de oliva?
A primera vista, podría sonar algo extraño el uso de aceite de oliva en este contexto, pero existen varias explicaciones para esto.
Es casi imposible que un luchador tenga control de otro mientras está cubierto de aceite, lo que aumenta el nivel de dificultad en este deporte y le da más diversión a los espectadores.
Otra creencia popular en la provincia de Edirne sugiere que los eventos de lucha usualmente se realizaban bajo un sol abrasador y el aceite de oliva les servía como bloqueador solar.
Por otro lado, Ali Güres, un historiador turco que estudia la lucha, argumenta que existe otra razón que puede explicar el uso del aceite. Explica que en el área donde se llevan a cabo las luchas, había muchas moscas y el aceite se usaba para alejarlas.
Con 2.380 luchadores que se espera participen este año, se utilizarán tres toneladas de aceite de oliva en la versión 658 de este festival.
Herencia otomana
En la provincia de Edirne, uno puede ver la influencia otomana en toda la ciudad, cosa que no debería sorprender, ya que esta fue alguna vez la capital del Imperio Otomano. Los sultanes apoyaban y promovían los eventos de lucha en aceite durante su reinado.
Koca Yusuf, conocido a nivel internacional como el Turco Terrible, fue el luchador principal del Sultán Abdulaziz y fue patrocinado por el palacio otomano. Murat I, el emperador otomano que conquistó la provincia de Edirne, abrió uno de los primeros campos de lucha en el país.
Murat I, Mehmed el Conquistador, Bayezid II, Solimán el Magnífico, Mahmut II y Abdulaziz fueron algunos de los emperadores que apoyaron la antigua tradición turca de la lucha en aceite e incluso ellos mismos la practicaron en algunas ocasiones.
Una tradición cultural que no muere
Ertugrul Tanrikulu, vicealcalde de la provincia de Edirne, señaló que la alcaldía municipal y las autoridades estatales han hecho todo lo posible para garantizar la continuidad del histórico festival de lucha en aceite de Kirkpinar, ya que éste está intrínsecamente relacionado con la cultura de Turquía.
“Intentamos preservar este evento deportivo en su forma original”, destacó el vicealcalde, y agregó que los rituales alrededor de este festival han sido los mismos desde hace siglos y que, incluso, las modificaciones que se han realizado, se han dado en línea con los conocimientos tradicionales de la lucha.
Después de años de revisar los archivos al respecto, la alcaldía logró crear una base de datos digital en la página http://www.edirnekirkpinar.comcomo parte de los esfuerzos del estado turco para garantizar la supervivencia de la cultura de las luchas al tiempo que le sigue el ritmo al mundo digital.
Tanrikulu añadió que este festival se encuentra en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la Unesco y que su reconocimiento a nivel mundial ayudará a que esta tradición siga viva muchos siglos más.
*Daniela Mendoza contribuyó con la redacción de esta nota.