Con el PND, el Gobierno le apuesta a la creación de nueva política en seguridad vial
Expedición de licencias de conducción y revisiones técnico-mecánicas serán ajustadas a los criterios de legalidad del gobierno nacional.
El Plan Nacional de Desarrollo 2018 - 2022 “Pacto por Colombia, Pacto por la Equidad”, establece que durante este Gobierno se trabajará en la elaboración de una nueva Política Transversal en materia de Seguridad Vial, la cual según las Agencia Nacional de Seguridad Vial, se construirá de manera articulada con los Ministerios de Transporte, Salud, y Educación, y la Policía Nacional, sin dejar al lado al sector privado, las organizaciones no gubernamentales (ONG), la academia y la sociedad civil.
El director de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, Luis Felipe Lota, explicó que “esta política debe tratar temas para los usuarios, los vehículos y la infraestructura, de tal forma que se promueva una movilidad segura y responsable”. El PND sancionado por el Presidente de la República, contempla 8 acciones que aplicadas de manera metódica, sostenida, sistemática e integral contribuirán de manera contundente con la reducción de la siniestralidad vial en el país.
A través de un breve comunicado, la Ansv, expuso las 8 acciones que los colombianos encontrarán dentro de la nueva política de seguridad víal.
1. Política Transversal de Seguridad Vial
En primer lugar y con el ánimo de crear unos lineamientos desde una perspectiva integral, el Plan Nacional de Desarrollo contempla la creación de una sinergia institucional, convocando a los Ministerios de Transporte, Salud y Educación sin dejar al lado al sector privado, las organizaciones no gubernamentales (ONG), la academia y la sociedad civil con el objetivo de elaborar una Política Transversal de Seguridad Vial.
2. Más seguridad vial desde las regiones
Una de las prioridades del Plan Nacional de Desarrollo en términos de seguridad vial es fortalecer la gestión integral de la ANSV desde el ámbito regional.Desarrollando estrategias y metodologías para la asignación de recursos en seguridad vial, así como el diseño de instrumentos y servicios que permitan la reducción de las tasas de siniestralidad, focalizadas por tipo de actor, población y características sociodemográficas.
3. Licencias de Conducción:
Teniendo en cuenta procesos de referenciación internacional y con los estudios del Observatorio Nacional de Seguridad Vial, se ha determinado que gran parte de los siniestros viales guardan una estrecha relación con la toma de decisiones de parte de los usuarios viales. Así las cosas, es fundamental que la licencia de conducción sea entendida como una responsabilidad individual y colectiva, que debe garantizar una total idoneidad, preparación y capacidad física y aptitudinal del conductor.
Durante el año 2018 fueron sorprendidos y sancionados 162.521 ciudadanos conduciendo un automotor sin haber obtenido nunca una licencia de conducción, así mismo, la Policía de Tránsito ha tenido que capturar a 6.971 colombianos por uso de documento público falso. En virtud de tal panorama, el Plan Nacional de Desarrollo permitirá al Ministerio de Transporte y la ANSV revisar, actualizar e implementar un nuevo modelo de otorgamiento, renovación y recategorización de licencias de conducción para todo tipo de vehículo.
4. Revisión técnico-mecánica
Según reportes del RUNT se calcula que en Colombia el 56 % de los vehículos que deben presentar revisión técnico-mecánica no contaban con este certificado durante el año 2018. (6 millones 500 mil vehículos), suscitando una serie de riesgos para la seguridad vial asociados a las fallas mecánicas, de hecho, del total de siniestros reportados al RUNT durante el año pasado, cerca del 54 % de los vehículos involucrados no contaban con la RTM al día (176.537).
Así las cosas, y ante la evidente correlación entre la evasión de la RTM y la siniestralidad, el Gobierno Nacional, a través del Ministerio de Transporte y la Agencia Nacional de Seguridad Vial ajustará la regulación, criterios de inspección, metodología y parámetros de la revisión técnico-mecánica, incluyendo mecanismos sancionatorios para disminuir la evasión y fraude, así como para garantizar la confiabilidad de los resultados del diagnóstico.
5. Se establecen las auditorías viales
La ANSV, el INVIAS y la ANI, con el apoyo de las entidades territoriales y la Dirección de Tránsito y Transporte de la Policía Nacional (DITRA), identificarán puntos y tramos críticos de siniestralidad vial, dando origen a acciones concretas que permitan mitigar las condiciones inseguras de los trazados viales. Estos diagnósticos tendrán como insumo los análisis del Observatorio Nacional de Seguridad Vial, complementado con inspecciones técnicas en cada región.
6. La atención de víctimas
Durante el año 2018 cerca de 37.000 colombianos resultaron lesionados en siniestros viales. El manejo posterior, las implicaciones económicas, psicológicas y familiares de cada víctima deben ser tratadas de manera integral. Así las cosas, el Ministerio de Salud, en coordinación con la ANSV, fortalecerá el sistema de vigilancia en salud pública en el seguimiento y monitoreo de las lesiones de causa externa por siniestros.
7. Mayor formación para autoridades de control
Una de las grandes dificultades que tiene el despliegue de las estrategias de seguridad vial en el país, radica en que en el 69.9 % de los municipios no existe una autoridad operativa de tránsito que haga control y pedagogía vial de acuerdo con el contexto socio cultural de su jurisdicción. Precisamente, el Plan Nacional de Desarrollo permitirá la implementación de un plan de formación a cuerpos de policía y autoridades de tránsito, para garantizar el adecuado ejercicio de vigilancia y control de tránsito y transporte en todo el territorio nacional.
8. La educación vial, desde la infancia
La Agencia Nacional de Seguridad Vial con apoyo del Ministerio de Educación, elaborará un plan de seguridad vial para niños y para entornos escolares, con el fin de garantizar la vida e integridad de los niños, niñas y adolescentes, además de propiciar hábitos de seguridad vial que permitan a los niños ser veedores del propio comportamiento.