Ejército capturó cabecilla del Clan del Golfo que tenía vigente Circular Azul de Interpol

Tropas del Ejército Nacional, en desarrollo de operaciones militares  en las regiones del Urabá y el Bajo Cauca antioqueño, lograron en las últimas horas la captura de tres integrantes de grupos armados organizados; dos del Eln y uno del Clan del Golfo.

El primer hecho trata de la captura de un importante cabecilla del Clan del Golfo que delinquía en Norte de Santander y que tendría una orden de captura vigente mediante Circular Azul de Interpol, ya que era buscado por las autoridades de varios países. Su detención se produjo en la vereda La Esperanza zona rural del corregimiento El Tres del municipio de Turbo. Hasta el sitio llegaron los uniformados gracias a información puntual y precisa aportada por la Red de Participación Cívica, que daba cuenta de la presencia en la zona de este individuo.

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Al sujeto conocido con los alias de David o El Negro, de 31 años de edad, se le sindica de delitos como fabricación, porte y tráfico de armas, concierto para delinquir, extorsión y violencia contra servidor público. Según se pudo establecer, habría incurrido en el delito de fuga de presas ya que en la actualidad gozaba del beneficio de detención domiciliaria en Cimitarra, Santander.

A este individuo le fue encontrada un arma de fuego, munición, equipos de comunicaciones y otros elementos que a esta hora son verificados por analistas de inteligencia militar. Fue dejado a disposición de la Fiscalía de Turbo, al igual que el material incautado para su respectivo proceso de judicialización.

El segundo hecho se produjo en la vereda Paulinas de Tarazá, en el Bajo Cauca antioqueño. Allí, gracias a información aportada por la Red de Participación Cívica, fueron capturados dos sujetos pertenecientes a la subestructura Héroes de Tarazá del Eln.

Entre ellos se encuentra alias Pibe, un peligroso criminal de 21 años de edad, a quien se le sindica de haber participado en la planeación y ejecución de acciones terroristas; entre ellas, la ocurrida en febrero de 2018 donde fue asesinado un soldado profesional en el sector de Puente Pescado, en momentos en que garantizaba la seguridad de la vía ante una amenaza de sabotear la movilidad por parte de ese grupo armado organizado. Fue este uniformado quien evitó que instalaran un artefacto explosivo.

También es sindicado de la muerte de otro militar ocurrida el 30 de mayo de 2018 en Raudal, zona rural de Valdivia, momentos en los cuales el Ejército apoyaba las labores humanitarias por la emergencia ocasionada durante la creciente del río Cauca, con motivo del taponamiento de los túneles de conducción de Hidroituango. También habría participado en la incineración de dos vehículos de carga el pasado 18 de marzo en el sector de El Quince de Valdivia.

A los dos sujetos les fueron halladas dos armas de fuego, munición de diferentes calibres y equipos de comunicaciones. Los capturados y el material incautado fueron dejados a disposición de las autoridades competentes para su respectivo proceso de judicialización.