Las pruebas en contra del exmagistrado de Justicia y Paz involucrado con “El Mellizo”

La W tuvo acceso al escrito de acusación en contra del magistrado de Justicia y Paz, Eduardo Castellanos, investigado por supuestamente favorecer al exjefe paramilitar Miguel Ángel Mejía Múnera, alias El Mellizo.

Según el documento, el abogado de alias El Mellizo, Marco Tulio Quintero y amigo del magistrado desde hace 20 años, le dio al togado la suma de 50.000 dólares en tres entregas:

1. Una de 20.000 dólares en el OMA de la séptima con 23.
2. Otra de 20.000 dólares entregados en el vehículo de Quintero Cano en el parqueadero del Parking de la carrera 9, entre calles 23 y 24.
3. Una de 10.000 dólares entregados también en el vehículo de Quintero Cano.

En el escrito de acusación, la Fiscalía General de la Nación asegura que en una carta enviada por alias El Mellizo al magistrado, el ex paramilitar y ex narcotraficante le dice que los dineros son “sin ningún compromiso (…) que me colabore en lo que pueda para sacar estos temas adelante, que yo soy un hombre serio y sé recompensar favores recibidos”.

Según la Fiscalía, el magistrado de Justicia y Paz le otorgó múltiples aplazamientos a Mejía Múnera dentro de un proceso que se le adelantaba en los tribunales de Justicia y Paz. Así mismo, permitió que dos abogados intervinieran en los alegatos de conclusión a favor de alias El Mellizo y suministró información a la defensa del paramilitar sobre discusiones que tenían los magistrados.

Quintero Cano habría recibido información por parte del magistrado, tanto así que el jurista conocía de antemano que a alias El Mellizo le iban a legalizar los cargos imputados. Además, le dio a conocer el salvamento de voto que estaba adelantando en el proceso seguido en contra del también ex paramilitar Salvatore Mancuso, información con la cual el abogado viajó a Estados Unidos el 21 de octubre a negociar la presentación de este salvamento.

Por otro lado, la Fiscalía cuenta que en el año 2018, el abogado de alias El Mellizo contactó al magistrado para decirle que había sido llamado a interrogatorio y que el ex paramilitar creía que él se había quedado con los dineros enviados a Castellanos. Por esta razón, grabó los contenidos de estas reuniones.

Los encuentros entre el abogado y el magistrado se habrían dado en Salitre Plaza y el Centro Internacional y otros en la ciudad de Villavicencio. En estos, se acordó que el abogado no diría la verdad sobre los envíos de dinero por parte de Mejía Múnera.