Mueren 40 miembros de grupo yihadista Al Shabab en ataque militar en Somalia
Ese grupo ha sido el responsable de los recientes carros bomba que han estallado en la capital somalí.
Al menos 40 miembros del grupo yihadista Al Shabab murieron en un bombardeo aéreo militar en Somalia, informó hoy la Agencia Nacional de Inteligencia y Seguridad (NISA) de este país del Cuerno de África.
En un comunicado divulgado en su cuenta de Twitter, la NISA precisó que el ataque ocurrió en la localidad de Forsooley, en la región de Baja Shabelle.
El bombardeo tuvo lugar después de una redada de agentes de la NISA en dos zonas en las que los yihadistas habían recaudado impuestos entre los residentes locales.
Las fuerzas somalís se apropiaron de las armas de los terroristas y destruyeron infraestructuras usadas por el grupo yihadista, afiliado desde 2012 a la red Al Qaeda.
La agencia de inteligencia somalí no precisó si ese ataque aéreo guarda relación con otro revelado el pasado sábado por el mando militar de EEUU para África (AFRICOM), en el que 13 integrantes de Al Shabab murieron en Gandarshe, también en Baja Shabelle.
El Ejército de EEUU coopera con el de Somalia y las fuerzas de la misión de la Unión Africana (AMISOM) en operaciones antiterroristas que incluyen la lucha contra los yihadistas y la destrucción de sus campos de entrenamiento e infraestructuras.
La NISA publicó el comunicado un día después de que Al Shabab se atribuyera un ataque con coche bomba cerca de un centro comercial de Mogadiscio, que causó al menos 12 muertos y 15 heridos.
El grupo también se declaró responsable ayer del asesinato del alto ejecutivo maltés Paul Anthony Fermosa, que trabajaba para la empresa dubaití DP World como gerente del puerto de la ciudad costera de Bosaso, en la región semiautónoma somalí de Puntlandia.
Al Shabab combate con el fin de instaurar en Somalia un estado islámico de corte wahabí.
El peor atentado del grupo terrorista somalí ocurrió en Mogadiscio en octubre de 2017 con camiones bomba que causaron más de 500 muertos.
Somalia vive en un estado de guerra y caos desde 1991, cuando fue derrocado el dictador Mohamed Siad Barre, lo que dejó al país sin Gobierno efectivo y en manos de milicias islamistas y señores de la guerra.