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Bernardo Alejandro Guerra favorecería a su hija desde el concejo de Medellín

El corporado no se declaró impedido para votar algunos proyectos de acuerdo que facilitarían las finanzas de la Alejandra Guerra Lotero.

Bernardo Alejandro Guerra . Foto: Colprensa

W Radio pudo establecer que Alejandra Guerra Lotero, hija del concejal de Medellín, Bernardo Alejandro Guerra, es contratista del Área Metropolitana del Valle de Aburrá, trabaja, específicamente en la Subdirección de Planeación Integral.

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Con esa entidad ha firmado tres contratos: uno en 2017 por 18 millones de pesos, otro por 31 millones de pesos en 2018 hasta septiembre, y uno más de 21 millones de pesos.

 

Lo que llama la atención es que el pago de esos contratos sale de recursos ambientales, los mismos que desde el concejo, lideró y ayudó a su trámite el corporado Bernardo Alejandro Guerra.

En 2016, hizo parte de la Comisión Segunda que es la que maneja el presupuesto, y votó a favor de que se trasladara el dinero al Área Metropolitana durante la vigencia de 2017.


Foto: Tomado del acta de la comisión segunda permanente, acta 06 del 8 de noviembre de 2016.

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Al año siguiente, sucedió lo mismo, pero en esa oportunidad el concejal fue ponente del proyecto.


 

En 2018 se volvió a aprobar una nueva sobretasa siendo Bernardo Guerra el coordinador de ponentes en el concejo. El corporado nunca se declaró impedido para participar en los debates, votar o ser el ponente de los proyectos.

Otro de los favorecimientos que habría liderado el concejal Guerra para su hija, tiene que ver con los acuerdos que se aprobaron para la excepción del pago de impuestos a los afectados con el colapso de la torre 6 del Space y a quienes fueron evacuados de sus apartamentos por fallas estructurales, todos de CDO.

La W conoció que Alejandra Guerra Lotero, fue una de las personas afectadas con esas evacuaciones por ser propietaria de uno de los  apartamentos del edificio Asensi.

Tras el colapso de Space, desde el Concejo de Medellín, Bernardo Alejandro Guerra promovió e integró una comisión accidental para hacerle seguimiento a los proyectos de la constructora responsable. 

Solo hasta noviembre de 2015, Guerra Hoyos se declaró impedido por primera vez para conocer más detalles del proceso reconociendo que su hija tenía una propiedad en el edificio Asensi.


Foto: Tomado del acta 766 del 21 de noviembre de 2015.

Sin embargo, no tramitó de manera adecuada ese impedimento para que fuera aprobado por el Concejo y cuando llegó el proyecto de acuerdo radicado por la Alcaldía de Medellín lo votó positivamente, con el conocimiento de que había un artículo que favorecería a los afectados por la constructora, exonerándolos del pago de impuesto predial hasta el 31 de diciembre de 2027, es decir, iba a beneficiar a su hija.