Tras 10 años, termina pleito penal del frigorífico San Martín de Porres
El punto final lo puso la Corte Suprema tras condenar a 95 meses de prisión por el delito de fraude procesal a Jorge Lara Urbaneja.
Después de una lucha jurídica de más de 10 años, la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia dio por terminado la disputa penal entre los socios y familiares del frigorífico San Martín de Porres.
El final de este caso se determinó con la condena a 95 meses de prisión y al pago de una multa de 405 salarios mínimos al ex director de Baker & Mackenzie, Jorge Lara Urbaneja, por el delito de fraude procesal.
La disputa, que ahora continuará en la Superintendencia de Sociedades, Juzgados y Tribunal Administrativo de Cundinamarca, enfrentó por más de una década a dos familias tradicionales de la alta sociedad bogotana. Los Uribe y los Lara, a través de la sociedad Laurel Ltda., se disputaban sus derechos sobre el frigorífico San Martín.
Los problemas en el famoso frigorífico de Bogotá arrancaron en 1993 pero se agudizaron en 2008, cuando los socios denunciaron al empresario Jorge Lara por el desarrollo de maniobras ilícitas para engañar a la Cámara de Comercio de Bogotá y, por esa vía, defraudar patrimonialmente a los socios mayoritarios del frigorífico San Martín de Porres.
Lara buscó llegar a la dirección de la empresa para tener su control económico, manipulando a los socios minoristas que eran, en su gran mayoría, familiares suyos, con quienes conformó una nueva asamblea para sacar a los terceros. Por esa razón, fue condenado por fraude procesal.