Tribunal de San Andrés orden protección integral al parque Johnny Cay
La Procuraduría explicó en un comunicado que en un término de seis meses la Corporación Autónoma Coralina debe actualizar el plan de manejo ambiental de Johnny Cay.
Un tribunal de Colombia ordenó a la autoridad ambiental de la isla de San Andrés la "protección integral" del Parque Regional Johnny Cay, afectado por la presencia masiva de turistas, la falta de redes de acueducto, alcantarillado, saneamiento básico y el inadecuado manejo sanitario.
Así lo informó hoy la Procuraduría General de Colombia (Ministerio Público), que había pedido al Tribunal Contencioso Administrativo de San Andrés, Providencia y Santa Catalina amparar los derechos colectivos al goce de un medio ambiente sano y la existencia de un equilibrio ecológico en este parque.
Johnny Cay, con sus apenas 1.500 metros de circunferencia y un mar de palmeras en su interior, debe su nombre al nativo que tuvo la idea de establecer un pequeño negocio de venta de agua de coco, pero fue a partir de ser declarado Parque Regional protegido en 2001 cuando se transformó en un exótico paraje. Además, en coordinación con la Dirección General Marítima (Dimar), debe asegurarse de que el número de visitantes no exceda la capacidad de carga en el área.
El Tribunal también ordenó que cada trimestre se prohíba el ingreso de turistas por tres días para la ejecución de un proceso de mantenimiento de la infraestructura del parque.
La Procuraduría sustentó esta petición en la presencia masiva y desmedida de visitantes, situación que se agrava por la falta de redes de acueducto, alcantarillado, saneamiento básico, la inexistente prestación de servicios públicos y el inadecuado manejo sanitario. Un estudio difundido en mayo del año pasado daba cuenta que el parque recibía unas 3.000 personas, cuando en realidad tenía capacidad para albergar 854 turistas.
Igualmente el Tribunal de San Andrés también impuso la realización de capacitaciones a los operadores logísticos para el cambio gradual de materiales desechables como plásticos e icopor por biodegradables.
Asimismo esos operadores deben elaborar un video para los visitantes en donde se debe enfatizar en los cuidados ambientales mínimos que deben tener por tratarse de un área protegida.